Pues esta rentable franquicia de espionaje internacional y acción desbordada sigue dando muestras de encontrarse en ‘plena forma’ al igual que su estrella principal Tom Cruise, aún cuando éste último ya anda rayando el medio siglo de vida.
Precisamente Cruise al ser parte importante del proyecto le está inyectando no solamente dólares sino años de vigencia a una de las pocas sagas que tienen como origen una afamada serie de televisión en este caso de los años setenta, cuando podíamos ver también ‘Los intocables’ entre otros shows en nuestros nostálgicos televisores de bulbos.
Es increíble la evolución que se aprecia al comparar aquellos ya lejanos capítulos y su fantasiosa tecnología que ahora forma parte de nuestra cotidianidad y que incluso en algunos casos ya hasta ha quedado obsoleta ante el avance desmesurado de la tecnología moderna tan rebosante de gadgets sobre todo en medios de comunicación, procesamiento de datos y vehículos de alto rendimiento.
Lo que no ha cambiado mucho es la médula temática, o por lo menos es lo que Tom Cruise (quien funje como productor de la cinta) nos deja ver de nueva cuenta, la ya muy sobada historia del poderoso malhechor que a toda costa quiere acabar con el globo terráqueo con todo y pasajeros, valiéndose de la tecnología militar. Tiene mucho paralelismo con James Bond, algo así como el 007 del gobierno gringo.
Hay un breve pero interesante discurso que este cerebro del mal esgrime como pretexto para sus funestos planes y que en resumidas cuentas tiene que ver con sucesivos finales del mundo y formas de vida residentes temporalmente, es decir, acontecimientos como la extinción de los dinosaurios que marcan en gran medida el fin de esa era de la ‘geografía terrestre’ aunque no tanto de la vida entera del planeta. Ahora él quiere ser pieza importante de otro suceso de extinción. Creo que esa argumentación que suena interesante, fue poco expuesta para dejar todo el foro a la espectacularidad de los efectos especiales, secuencias de acción delirante y locaciones que verdaderamente completan un vertiginoso espectáculo audiovisual. Hay secuencias con todo lo anterior en Praga, Moscú, la India y principalmente en Dubai donde Mr. Cruise no podía dejar pasar la oportunidad para mostrar uno de los rascacielos más altos y vistosos del mundo el Burj Khalifa (con sus más de 800 mts. de altura) pero más como mera escenografía de este episodio que como parte importante de la historia.
La cuarta entrega de Misión Imposible llamada ‘Protocolo Fantasma’ no será recordada como la mejor de la serie o como referente de este tipo de cine de acción pero por el momento cubrirá seguramente su cuota con la exigente taquilla de Hollywood y te hará pasar un rato agradable. Después de la película será inevitable buscar en Google, información e imágenes tanto del Burj Khalifa como del hermoso concept BMW Vision EfficientDynamics, que conduce Ethan Hunt en India
Precisamente Cruise al ser parte importante del proyecto le está inyectando no solamente dólares sino años de vigencia a una de las pocas sagas que tienen como origen una afamada serie de televisión en este caso de los años setenta, cuando podíamos ver también ‘Los intocables’ entre otros shows en nuestros nostálgicos televisores de bulbos.
Es increíble la evolución que se aprecia al comparar aquellos ya lejanos capítulos y su fantasiosa tecnología que ahora forma parte de nuestra cotidianidad y que incluso en algunos casos ya hasta ha quedado obsoleta ante el avance desmesurado de la tecnología moderna tan rebosante de gadgets sobre todo en medios de comunicación, procesamiento de datos y vehículos de alto rendimiento.
Lo que no ha cambiado mucho es la médula temática, o por lo menos es lo que Tom Cruise (quien funje como productor de la cinta) nos deja ver de nueva cuenta, la ya muy sobada historia del poderoso malhechor que a toda costa quiere acabar con el globo terráqueo con todo y pasajeros, valiéndose de la tecnología militar. Tiene mucho paralelismo con James Bond, algo así como el 007 del gobierno gringo.
Hay un breve pero interesante discurso que este cerebro del mal esgrime como pretexto para sus funestos planes y que en resumidas cuentas tiene que ver con sucesivos finales del mundo y formas de vida residentes temporalmente, es decir, acontecimientos como la extinción de los dinosaurios que marcan en gran medida el fin de esa era de la ‘geografía terrestre’ aunque no tanto de la vida entera del planeta. Ahora él quiere ser pieza importante de otro suceso de extinción. Creo que esa argumentación que suena interesante, fue poco expuesta para dejar todo el foro a la espectacularidad de los efectos especiales, secuencias de acción delirante y locaciones que verdaderamente completan un vertiginoso espectáculo audiovisual. Hay secuencias con todo lo anterior en Praga, Moscú, la India y principalmente en Dubai donde Mr. Cruise no podía dejar pasar la oportunidad para mostrar uno de los rascacielos más altos y vistosos del mundo el Burj Khalifa (con sus más de 800 mts. de altura) pero más como mera escenografía de este episodio que como parte importante de la historia.
La cuarta entrega de Misión Imposible llamada ‘Protocolo Fantasma’ no será recordada como la mejor de la serie o como referente de este tipo de cine de acción pero por el momento cubrirá seguramente su cuota con la exigente taquilla de Hollywood y te hará pasar un rato agradable. Después de la película será inevitable buscar en Google, información e imágenes tanto del Burj Khalifa como del hermoso concept BMW Vision EfficientDynamics, que conduce Ethan Hunt en India
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