lunes, 20 de febrero de 2012

Los Descendientes

Luego de ver esta película y asumiendo que el protagonista fuera el espectador mismo, es donde puede empezar a cobrar sentido una historia como la que nos cuenta ‘Los Descendientes’, una de esas tramas que NO te mantienen ‘al filo de la butaca’ como decimos con una emocionante aventura o ‘al borde del llanto’ cuando vemos un drama y expresiones similares, sino que más bien consigue tenerte con la boca seca y un poco el estómago apretado.

Es una película acerca de un particular drama familiar que consigue por momentos hacernos tener sentimientos encontrados, primero acerca de una persona y luego, casi de inmediato, acerca de nosotros mismos, sobre todo si tu estado civil es el de casado (o parecido, o equivalente). El mensaje llega incluso si fueras cualquiera de los dos cónyuges porque lo único que tendrías que hacer es invertir los roles.

‘Los Descendientes’ es una película cuidadosamente realizada, bien dirigida y actuada con mucho realismo. En ella se ha dicho que George Clooney ha hecho el mejor papel de su carrera, cosa que podría ser cierta aunque esos ‘asomos’ a ser una gran actuación no me resultan del todo convincentes para aspirar a un Oscar. Al final del día sigue siendo George Clooney solo que ligeramente desprovisto del ‘charm’ irresistible. Tal vez ya empieza a querer hacer personajes más de banqueta y microbús, de contribuyente moroso y paciente del urólogo, de marido promedio.

Una historia que se torna interesante cuando empiezan a flotar los restos de un personaje naufragado y sin ocasión de asumir su autodefensa. Una clara muestra de cómo los actos cotidianos van adquiriendo algún valor que en presencia o en ausencia se manifestarán y que impactarán a quien se encuentre cerca. Tal vez parezca más una telenovela llevada a la pantalla grande pero tiene su discreta moraleja para ambas esquinas del cuadrilátero conyugal.

Con un reparto encabezado por George Clooney que como ya lo cité antes, con este rol va por el Oscar como mejor actor de 2011, hay interesantes participaciones como la de Shailene Woodley, juvenil actriz que encarna a la hija mayor de Matt (Clooney) que asume gran protagonismo tanto por la buena actuación como por la importancia de su personaje en el calor creciente de la historia. Shailene muestra a una adolescente con los rasgos propios de su edad y de su condición de víctima colateral pero con gran fuerza interpretativa que deja gran sabor de boca. También llena la pantalla de carisma la pequeña Amara Miller como Scottie, la menor de las hijas de Matt.

Otro personaje que aunque mucho más breve muestra también el poliedro emocional, es el que desempeña Robert Forster quien interpreta al suegro apesadumbrado, al padre que solo puede (o quiere) ver la tragedia de su propia familia y desde nuestra butaca no podemos culparlo por ello.

Claro, no puedes culparlo a él, ni a las hijas, si tu crees que eres el agraviado lógicamente te eximes de culpabilidad, a la inculpada a quienes todos acusan también podría tener una buena defensa, de hecho su padre lo hace en alguna medida al igual que la mejor amiga.
‘Los Descendientes’ lleva adherida otra encrucijada que en un punto culminante cobra algo de importancia sin llegar a ser detrminante a la historia principal y es un conflicto no del matrimonio sino del patrimonio donde hay otro tipo de estrés para el ahora sufrido Matt King (George Clooney).

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