"2012" La cuenta regresiva comenzó

 Iván Salmerón C./cinecuaro
ivanespiral@gmail.com

Mientras el reloj y el calendario avanzan irremediablemente, las evidentes señales del tan llevado y traído calentamiento global aparecen día con día en noticias, documentales y por supuesto en el evidente desfase de las estaciones que podemos vivir en carne propia. No solo es información cotidiana, sino que está moviendo a manifestaciones de naturaleza diversa. En el cine la más reciente es el lanzamiento de "2012" la nueva cinta de Roland Emmerich quien está marcando una huella muy particular con su tendencia a retratar la destrucción masiva. Parecía que con "El día después de mañana" era suficiente en visiones apocalípticas del destino humano a partir, precisamente del calentamiento global.

Ahora con "2012", Emmerich no se queda en medias tintas y lanza toda su artillería a acabar con el mundo entero. Atrae para su filme de manera oportunista toda esa información que diariamente nos abarrotan los medios sobre el cambio climático y que por supuesto viene acompañada de dramáticas escenas de la furia de la naturaleza lo mismo en Tailandia que en Chiapas, Tabasco y Veracruz, p. ej. Otro asunto que capitaliza Emmerich es la predicción del calendario maya que en estos días y de manera creciente está generando temor y confusión en la opinión pública internacional. Esto se refiere a un evento astronómico que los mayas profetizan como el final de una era y que Emmerich traduce como: el fin del mundo.

Sin duda esta mezcla apocalíptica sugiere un excelente caldo para un suculento y picoso guisado. La producción en general desarrolló escenarios sumamente explícitos de cataclismos en mar y tierra, un trabajo verdaderamente extraordinario de alto impacto audiovisual, estoy convencido que en este rubro se convertirá en un referente de este tipo de secuencias en la historia del cine.

El argumento parecía muy interesante pues recrea un escenario hipotético basado en eventos actuales de realidad ambiental y también en descripciones astronómicas de una cultura notablemente avanzada en las ciencias como lo fue la cultura maya. Al final todo el material tanto de la historia como de los efectos especiales terminaron por avasallar algo que prometía más.

Considero que en la dirección, Emmerich se arriesgó demasiado en muchas de las frenéticas escenas en las que participan tanto el protagonista como su círculo cercano (hijos, ex-esposa, etc) pues en muchos momentos pierde credibilidad debido a lo exagerado que resulta su "buena suerte". Es tan densa en destrucción que casi "borra del mapa" la parte de actuaciones. En lo particular me agradó ver la caracterización de Woody Harrielson que aunque hace un papel pequeño lo desarrolla de manera muy convincente. Danny Glover se suma a Morgan Freeman al representar en cine al presidente de Estados Unidos de raza negra, recordemos que este último lo hizo en Deep Impact . Como dato curioso, en estos dos casos que tienen que ver con la destrucción del mundo,  en la nación más poderosa gobierna un presidente...negro.

El papel de John Cusack fue puesto en una situación muy difícil ya que como lo mencioné antes participa en inverosímiles secuencias de peligro de las que sale milagrosamente ileso (ya ni nuestro aguerrido "Pantera" que con frecuencia va a dar al hospital).Amanda Peet logra un buen desempeño y aparte nos deleita con su bella presencia (claro en el caso de los caballeros).

Historia de temática muy interesante pero contada con muchos trastabilleos que aunque logra mantener plena atención en la pantalla, no logra impregnar del todo nuestro recuerdo a lejanas fechas más allá del ...2012.